martes, 25 de agosto de 2020
viernes, 24 de julio de 2020
Nuevo Informe sobre el ¨Papaya
Plan de Cabal - Anéeka de
Temmer
“Nuevo informe de Anéeka sobre
qué es lo que está planeando el Cabal. Es el tiempo a luchar al máximo, como
cada uno pueda, para redirigir estos MUY probables eventos. Gracias CLAUDIA por
aportar tu voz de Anéeka!”
Etiquetas:
Anéeka de Temmer,
Informe sobre el Papaya,
Plan Cabal
domingo, 21 de junio de 2020
domingo, 24 de mayo de 2020
domingo, 3 de mayo de 2020
Utopia2020: Bill Gates: “volverá la normalidad cuando todas la...
Utopia2020: Bill Gates: “volverá la normalidad cuando todas la...: El fundador de Microsoft y principal financista de la OMS publicó el 30 de abril en su web personal un análisis de lo que constituye su...
sábado, 2 de mayo de 2020
El precio del petroleo comienza a desplomarse, pero eso no es lo peor
Interesante reportaje de Gabriel Bulgarkov sobre la manipulación de los precios del petroleo deltro del contectos de esta conspiración mundial que estamos develando
martes, 28 de abril de 2020
Mas sobre la Conspiración Mundial del Nuevo Orden
(Video tomado de Ok.Ru)
Mucho se ha hablado sobre la Conspiración Mundial de "Nuevo Orden", la "Agenda 2021" y "La pretención de las elites del mundo para el control de la población, es decir la nueva esclavitud.
Posiblemente este video suene fantacioso y una pieza de ciencia faicciónm pero su planteamiento de fondo esta en concordancia con las investigaciones de innumerable investigadores que han dado pie para elaborar este blog de aspecto conspiranoico pero basado en un cumulo de investigaciones de ceintificos y duchos en la materia.
Lo traemos y sometemos a su consideración y mucho sabriamos agradecer los comentarios y sugerencias.
"JAQUE MATE A LA HUMANIDAD"
https://youtu.be/X67EbF2JbBg
Este vídeo fue creado por Anony News en 2008 lo publicó en 2011 donde habla del
NUEVO ORDEN MUNDIAL y su plan de gobernanza global. El coronavirus es parte de
ese plan de gobernanza global
domingo, 26 de abril de 2020
El mundo tras la pandemia
Luis Britto García
Durante el siglo pasado, el capitalismo aprendió a utilizar las
crisis para forjar los más perfectos instrumentos
contrarrevolucionarios: los fascismos. Una crisis de postguerra fue
pedestal de Benito Mussolini y escalinata de Adolfo Hitler; sucesivas
depresiones fueron campos de cultivo de los votos que elevaron a
Margaret Tatcher, a Nixon, a Bush padre e hijo, a Donald Trump. Ni la
dialéctica ni los virus se llevarán al capitalismo. A sus víctimas nos
toca pensar las estrategias, crear las organizaciones, dinamizar los
movimientos que lo aniquilen. O hacemos prevalecer la sociedad sobre la
economía, o no tendremos economía ni sociedad.
La Haine
https://www.lahaine.org/
VER ARTÍCULO (Haz Clic aqui)
Cinco meses han pasado desde la detección del Coronavirus, se lo ha
declarado pandemia, pero no podemos prever sus efectos definitivos.
Sabemos que su tasa de mutación es baja, por lo cual es poco probable
que mute hacia una variedad inofensiva. Sin embargo, esa estabilidad
implica que se podría desarrollar contra él una vacuna de eficacia
perdurable. Su destino y el nuestro dependen de las políticas
sanitarias, vale decir, de la respuesta humana. O de las respuestas
humanas, porque a pesar de que la pandemia es una sola, se han planteado
maneras antagónicas de enfrentarla.
Dos concepciones sobre la sociedad y la economía se disputan el mundo.
La primera sostiene que la economía existe para servir a la sociedad y
que por tanto en alguna medida debe estar bajo control social. La
segunda afirma que la sociedad existe para servir a la economía y que
por tanto la debe dejar hacer, dejar pasar. Las posiciones ante la
economía se traducen en estrategias ante la pandemia. Las naciones que
intentan controlar la economía –China, Cuba, Venezuela- controlan el
contagio. Las naciones que dejan hacer y pasar a la economía también
dejan hacer y pasar al coronavirus
En los países donde la sociedad ejerce algún grado de control sobre la
economía se garantizó asistencia médica a todos; se adoptó la cuarentena
para impedir el contagio personal, se prefirió la pérdida de dividendos
a la de vidas. En los países que dicen dejar hacer y dejar pasar, se
prefirió la pérdida de vidas a la de dividendos: no se adoptó
cuarentena; se reservó la asistencia médica sólo para quienes pudieran
pagarla. En EEUU, por ejemplo, no hay política nacional de cuarentena;
sólo se puede solicitar licencias de enfermedad por dos semanas en
empresas de más de quinientos empleados; más del 40% de la población
carece de seguro médico, el cual por cierto incluye cláusulas que lo
exoneran de cubrir casos de pandemia, y tampoco existe pago extra ni
seguro para trabajo de alto riesgo, como el de enfermeros, camilleros o
conductores de ambulancias.
Quizá por ello sea el país que encabeza las estadísticas mundiales de la
pandemia con casi 800 mil casos confirmados, más de 40 mil fallecidos, a
una proporción de 195 por 100.000 habitantes. España, país neoliberal
si los hay, ocupa un honroso tercer lugar mundial en la pandemia, con
200 mil casos, 20 mil víctimas, 400 muertes diarias y 391 por 100.000
habitantes. Mientras que China, donde se localizaron los primeros casos,
a pesar de su enorme población presenta sólo 83.356 casos confirmados,
con 4.636 fallecidos, en proporción de 6 por 100.000 habitantes. Cuba,
país bloqueado y agredido, presenta sólo 1035 enfermos, con 34
fallecidos, 7 por cada 100.000 habitantes.
Tomamos estas cifras de 'El País', diario español que se ocupa
obsesivamente de cuanto ocurre en Venezuela, y que curiosamente omite
informar sobre la salud en nuestro bloqueado, calumniado y agredido
país, donde apenas se han presentado 204 casos, con 111 recuperados y 9
fallecidos. A tal globalización, tal pandemia informativa. 'El País'
tampoco informará que China, Cuba y Venezuela cooperan con otros países
enviándoles medicinas, personal y equipos médicos, mientras que EEUU
bloquea a Venezuela para que no pueda recibir alimentos ni medicinas,
con agresivo despliegue de guardacostas, destructores, barcazas de
desembarco, aviones de reconocimiento Awacs, de apoyo y batalla F-8,
Joint Stars, aeronaves de vigilancia, helicópteros, guardacostas,
Marines, efectivos de la Fuerza Aérea y fuerzas de Operaciones
Especiales en números y equipamientos no determinados.
Los números citados invitan a la rectificación, los poderes dominantes
convocan a la obstinación. Como de costumbre, sólo piensan cómo sacarle
provecho al desastre. Henry Kissinger afirmó en el Wall Street Journal
que “Los líderes están lidiando con la crisis desde una perspectiva
principalmente nacional, pero los efectos corrosivos que el virus tiene
en las sociedades no conocen fronteras. Si bien el ataque a la salud
humana será —esperemos— temporal, la agitación política y económica que
ha desencadenado podría durar generaciones”. Concluye el planificador de
los genocidios de Chile y de Indonesia que es indispensable
“salvaguardar los principios del orden mundial liberal”, y para ello
enfrentar la crisis como un problema internacional o más bien
globalizador, con medidas que asimismo podrían “durar generaciones”. Más
de lo mismo por los siglos de los siglos.
Pues la pandemia ha servido como cortina de humo mediática para distraer
la atención sobre la paralela patología del sistema económico. No
sabemos el porcentaje de la población del planeta que perecerá por causa
del morbo. Hemos indicado que, en los primeros dos meses de este año,
causó 2.360 muertes, mientras en el mismo lapso fallecían 69.602
personas por resfriado común; 140.584 por malaria. 153.696 por suicidio,
193.479 por accidentes de tráfico, 358.471 por abuso del alcohol. Estas
hecatombes perfectamente evitables no parecen haber tenido efectos en
el mundo tal como lo conocemos. Pero la dificultad de controlar un
patógeno nuevo podría permitir su propagación exponencial.
Ya en 1980 el Departamento de Estado en el Informe Global 2000 para el
Presidente, preparado conjuntamente con el Consejo de la Casa Blanca y
la Comisión Trilateral, afirmaba que a la vuelta del siglo habría un
excedente de 2.400 millones de personas. Para el neoliberalismo es
insoluble problema la enorme masa de excluidos a los cuales no puede
ofrecer trabajo ni integración a la producción ni al consumo, sumado al
de una deuda pública impagable, una moneda sin respaldo y una economía
de casino cuyo principal producto son dividendos especulativos . Nada
más cómodo que culpar al coronavirus y a la cuarentena de la crisis que
sacude al mundo. Pero las crisis económicas, siguiendo la profecía de
Marx, se han hecho cada vez más continuas, graves y devastadoras sin
necesidad de un solo estornudo. Bastaría una significativa ausencia de
trabajadores en las maquilas y de compradores en los mercados para que
el sistema se desplome.
Aunque ninguna epidemia eliminará por sí sola el capitalismo, salvo que
sea tan destructiva que aniquile el sistema económico en su casi
totalidad. Pero recordemos que guerras cuyo costo material y demográfico
debilitaron a los imperios abrieron paso a las grandes revoluciones del
siglo pasado. La primera Guerra Mundial desbarató a tal punto las
estructuras del zarismo, que el pequeño partido bolchevique pudo
declarar la primera gran revolución socialista en el país más extenso
del planeta. La Segunda Guerra Mundial, con su costo humano de 60
millones de vidas, no sólo barrió al Imperio del Sol Naciente,
facilitando el triunfo del Partido Comunista Chino: también dio paso a
una oleada de descolonización que sacudió a los imperios británico,
francés, italiano, holandés y belga. Una catástrofe a la vez económica y
demográfica podría terminar de debilitar a los imperios actuales y
crear oportunidades revolucionarias. Pero esto no culminará por sí solo.
La Haine
https://www.lahaine.org/